El
Puente Eduardo Villena Rey fue construido en el año 1967 e inaugurado al año
siguiente durante el gobierno del ex presidente de la República, Fernando
Belaúnde Terry. Este se encuentra ubicado en el distrito de Miraflores y
constituye la unión de los malecones Cisneros y de la Reserva. Asimismo, se le
atribuyó dicho nombre en homenaje a uno de los ilustres Alcaldes de la
Municipalidad de Miraflores.
Hace
no muchos años, el puente fue remodelado y su nueva estructura comprende 160 planchas de policarbonato transparentes
a los costados con protección
ultravioleta. Este material tiene una resistencia
200 veces superior al vidrio común. Cuenta con 90 postes a lo largo de los
104 metros de longitud.
Esta
remodelación se realizó principalmente por los funestos episodios que se realizaban en el mismo, por ello este
puente también es conocido como el “Puente
de los Suicidas”, puesto que fue el escenario de 32 suicidios y 33 intentos
de suicidio entre los años 1988 y 2003.
Los
medios de comunicación, sobre todo la televisión y los periódicos, influyeron
en crear la idea de una percepción
distinta de los puentes. Ya no se les veía solo como una facilidad para
llegar al otro extremo, sino también lo empezaron a ver como un medio por el
cual las personas podían terminar con sus vidas, dado los múltiples casos que
conllevaron esa tragedia y que se transmitían en las noticias. En uno de ellos,
se relataba la muerte de una mujer tras caer desde el puente Villena Rey de una
altura aproximadamente de 100 metros. Así se empezó a formar una imagen de peligro, sobre todo de este
puente, y por ello se tomaron diversas medidas de seguridad, como lo fue la
incorporación de las planchas de policarbonato alrededor para impedir futuros
suicidios.
Sin
embargo, han surgido otros problemas con relación a dicho puente. Al consultar
con las personas que transitan por éste, estos afirmaron que, si bien ya no se
realizan suicidios, sigue persistiendo la inseguridad
en otros aspectos, por ejemplo el serio
deterioro en los extremos de su plataforma, el cual ha ocasionado más de un accidente de tránsito en la zona,
según aseguraron los vecinos. Entre estos se encuentra el desgaste y el óxido en las barandas metálicas, así como la exposición del cableado eléctrico
que permite la iluminación de la vía, además de las grietas y los desniéveles
que posee la pista. Estas fallas estructurales que presenta el puente, a su
vez, se vinculan con los accidente de tránsito.
Javier
Piqué, decano departamental del Colegio de Ingenieros de Lima, explicó que la
junta entre la plataforma de un puente y la pista es natural y obligada.
"Lo que sucede es que, con el tiempo, las juntas se van deteriorando por
el hundimiento de la pista y por los cambios de temperatura", señaló.
A
partir las entrevistas que realizamos a los transeúntes de la zona, salieron a
la luz algunas palabras con las cuales ellos describen el puente Villena Rey,
como, por ejemplo, “útil”, “antiguo”, “descuidado”, entre otras.
Por
un lado, sobre todo los ciclistas, confirmaban lo dicho anteriormente sobre la
inseguridad del puente, sugiriendo que debería existir una ruta solo para
ciclistas o, por lo menos, un carril más ancho, puesto que no existe seguridad
interna para ellos y los carros se encuentran muy próximos a ellos, lo que
podría causar accidentes e, incluso, muertes.
Y,
por otro lado, algunas personas señalaban que el puente significaba para ellos
el poder ahorrar tiempo y cortar camino, mientras que otras afirmaban que este
puente era elegante y que coincidía con temática paisajista de Miraflores.
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