Para la presente
investigación, se ha partido de la perspectiva interpretativa para poder
abordar distintos conceptos relacionados con la creación de ideas por parte de
las personas que, en este caso, transitaban por los puentes anteriormente
mencionados, localizados en los distritos de Barranco y Miraflores.
La perspectiva
interpretativa le da mucha importancia al tema de la comunicación de masas ya
que afirma que ésta actúa como creadora de significados y hasta es capaz de
definir universos simbólicos en la mente del público al que llega (hasta dónde
se debe pensar o qué cosas se deben decir de algo).
La relación de las personas
con el medio debe ser abordada desde el punto de la comunicación de masas y no
como algo que se nos impone de forma violenta, es decir, no somos víctimas de
algo sino que estamos influenciados por, en este caso, los medios de
comunicación.
Para el trabajo en cuestión,
se da mucha importancia al individuo (visión desde lo micro) y a sus relaciones
con las demás personas con las que comparte un contexto específico, es decir,
no se observa a las personas como un grupo afectado por algo sino que se
analiza los efectos u opiniones de cada individuo.
Como se sabe, dentro de la
perspectiva interpretativa existen muchas teorías que pretenden explicar el
acto comunicativo en la sociedad, para ello, hemos abordado esta investigación
basándonos en la Teoría Construccionista, cuyo principal enunciado es que todos
aportamos a la construcción de la realidad ya que su construcción se da en
función de las interacciones de las personas.
Dicha teoría nos plantea que
“Si todo en la realidad se construye, el orden social no se da naturalmente”,
por tanto, podríamos partir de la idea de que las opiniones que hemos podido
recabar sobre las distintas percepciones que se tienen sobre los puentes no han
sido dadas naturalmente, sino que han sido construidas por los transeúntes que,
obviamente, viven bajo la influencia mediática de anuncios, propagandas, entre
otros.
“Las imágenes no mienten” es
algo que muchas personas suelen decir, pues, tal y como sucede con la
televisión, los medios han adquirido un gran poder que les confiere un cierto
grado de autoridad, con lo cual, los pobladores construyen sus ideas en función
no solo de sus interacciones con sus iguales, sino también a partir de sus sus
interacciones con los distintos medios de comunicación de quienes, obviamente,
no dudan.
Los medios, en cierta forma,
nos proporcionan una realidad objetiva (verdades universales) que debe ser
entendida como completamente fidedigna. Esta idea de la realidad está basada en
diversos símbolos que sirven como pautas a las personas para poder entender una
realidad especifica. Lo que en nuestro caso encontramos es que, a través de los
medios, se le da un tratamiento a los puentes, en cierta forma, desmesurado, ya
que se les plantea como grandes obras que dan “solución a problemas de gran
envergadura”. Los medios intentan “vender” dichas infraestructuras como
“salvación” para problemas grandes que afrontan muchos distritos, logrando así
que muchas personas tomen esas ideas, difundidas a gran escala, como verdades
acerca del tema. En muchos casos, las personas ni siquiera están enteradas de
detalles importantes del puente, pero se puede ver la gran influencia de los
medios pues la gran mayoría, repite los adjetivos utilizados en las redacciones
“propagandísticas” que se utilizan para difundir estas “maravillas
arquitectónicas” que, en la actualidad,
no sirven únicamente como un “atajo”, sino que también son de carácter
decorativo. Lo cierto es que, hoy en día, la utilidad de algunos puentes puede
ser criticada duramente, es por eso, quizá, que cada vez se les pretende
enaltecer más, porque se sabe que nadie iría en contra de algo que brinda
“ayuda generalizada”.